domingo, 26 de septiembre de 2010

26 S: día del empleado de comercio es DIA NO LABORABLE

Desde el 2009 rige una ley por la cual se recuperó el carácter no laborable del día del gremio.


Por ello a partir de este 26 de setiembre de 2010 las patronales no pueden obligar a trabajar a los empleados.

El día del gremio, es para cada gremio, un día en que se conmemora su historia, no la de los burócratas, sino la de la lucha de los trabajadores, sus conquistas y sus mártires. Por ello se tiene que defender como se defiende el primero de mayo para toda la clase obrera.

Pero las patronales están retobadas, y en general los súper y call center pretenden abrir y presionan a los empleados a presentarse a trabajar. Lo más grave es la posición cómplice del sindicato, que no informa nada, no mueve un pelo ante la apertura de las empresas, y deja pasar las apretadas patronales. Esto tanto por el lado del “gordo” Cavalieri, como del K Ledesma, que promovió una ley que ahora deja avasallar, sin hacer asambleas, cortes, ni nada más que algún volante perdido.

Las agrupaciones abajo firmantes reclamamos el cierre de las empresas este domingo 26. Denunciamos la pasividad del sindicato e INFORMAMOS QUE POR SER UN DÍA NO LABORABLE, SI LA EMPRESA ABRE, ES OPTATIVO PARA EL TRABAJADOR ASISTIR O NO, Y EN CASO DE SI HACERLO SE LE DEBERÁ PAGAR EL DOBLE.

Rechazamos cualquier apriete patronal para que no nos tomemos nuestro día


COMBATIVOS MERCANTILES
TELEMARKETERS EN LUCHA

Editorial: Llamado a todos los agentes de call centers

Según un artículo de El Cronista, en el mes de agosto la inflación acumulada de 2010 ya superó a toda la inflación del 2009. Y todavía faltan los aumentos en las tarifas, y la navidad, que es la época de mayor inflación.



La pérdida del poder adquisitivo de los salarios, y una economía que se hace insoportablemente cara para los trabajadores (dolarización de precios), plantean la necesidad de una reapertura de las paritarias. En el caso de Comercio, la burocracia sindical cerró por un aumento del 27% el semestre pasado, en tres cuotas, algo muy lejano a aquello por lo que veníamos luchando los trabajadores, con paros y asambleas en todo el país ($3000 de básico).



Pero no sólo convalidó la burocracia sindical (en su versión kirchnerista o de los “gordos”) un acuerdo salarial insuficiente, sino que además, en el caso específico de los call centers, se dejó sin efecto la ley 26,474 de jornada reducida. De acuerdo a esta ley, que entró en vigencia en enero de 2009, todos aquellos agentes de call centers que trabajaran más de 32 horas semanales debían percibir un salario de jornada completa (es decir, por 48 horas semanales).



Las patronales y la burocracia sindical pretenden enterrar el reclamo de insalubridad de la tarea, y frenar los juicios que los trabajadores de call hacen para que se les pague retroactivamente el diferencial de una ley que las patronales de los call centers nunca cumplieron. Advertimos, de paso, que las patronales están incumpliendo ahora uno de los puntos más espinosos del acuerdo de junio: no están pagando como horas extras aquellas horas que superan las 36 semanales, según lo estipulado en el último acuerdo paritario. Esto afecta a una enorme cantidad de agentes, especialmente a aquellos que tienen jornada de nueve horas.



Al problema de la insalubridad, se añade el de los despidos. Teleperformance está ejerciendo una masacre laboral sobre las cuentas de Vodafone, que ya se cobró más de 600 despidos. En Teletech-Orange se ha iniciado un proceso de despidos “con causa”, mientras que en otros call centers hubo numerosos despidos por razones sindicales y políticas.



Todo apunta a mantener un orden de hierro que garantice las fabulosas ganancias de las compañías, en base a una brutal rotación laboral, y a los bajos salarios.



Recientemente, sin embargo, los agentes de Actionline Tacuarí obtuvieron un importante triunfo, logrando la reincorporación de una compañera al cabo de dos jornadas de huelga.



La conclusión más importante de este triunfo es que las patronales no son invencibles, y que por lo tanto, las condiciones de trabajo pueden cambiar. Mediante la lucha, es posible modificar la relación de fuerza con las patronales.



Debemos hacerlo, incluso si consideramos el trabajo en los calls como un trabajo pasajero. Debemos hacerlo por nosotros mismos, y por el conjunto de la juventud que cae irremediablemente en los calls, ante la ausencia de otra perspectiva (Atento y Sykes acaban de desembarcar en Chaco).



No permitamos que estas compañías se queden con la salud física y mental de toda una generación. Luchemos por la reapertura de las paritarias, la insalubridad de la tarea (jornada de seis horas pagada como jornada de ocho, con descansos interllamadas), y por el derecho a la organización política y sindical en los edificios. ¡Reincorporación ya de todos los despedidos por luchar!.


Publicado en La Voz de los Call Centers, número 4, septiembre 2010.

Conclusiones de una huelga triunfante

Como hemos señalado ya en dos declaraciones, los trabajadores de Actionline Tacuarí han obtenido un triunfo resonante, que tiene una gran importancia para todos los luchadores y trabajadores de call centers: después de dos jornadas de huelga, impusieron la reincorporación de una compañera, que la patronal había despedido arbitrariamente, bajo el clásico modus operandi de inventar un motivo para poder despedir “con causa”.



El proceso huelgístico, precedido por otras luchas y por una intensa deliberación en el edificio (luego del cierre de las paritarias), quebró la intransigencia patronal, que apostó al amedrentamiento y perdió.



La huelga de Actionline demuestra, en primer lugar, que es posible torcerle el brazo a las patronales mediante la lucha, por fuertes que las empresas parezcan. En segundo lugar, golpea en el corazón del régimen de superexplotación de los call centers, basado en la impunidad para despedir, y en la persecución sistemática de cualquier tipo de organización independiente de los trabajadores.



Por último, potencia otros conflictos planteados en la compañía, como el problema estratégico del encuadramiento de las cuentas bancarias, y la lucha de la Comisión de Reclamos, que exige elecciones complementarias, y la reincorporación de una activista despedida del edificio de Viamonte.


Publicado en La Voz de los Call Centers, número 4, septiembre 2010.

Cuentas bancarias: por el reencuadramiento en el convenio de bancarios

Según un acuerdo de fines de 2009, aquellos trabajadores que revisten en call centers bancarios deben ir pasando a planta efectiva y bancaria. Un trabajador tercerizado en Comercio cobra un tercio de lo que le correspondería según el acuerdo aludido.



Ante cualquier movimiento práctico en este sentido, las empresas reaccionan furiosamente, tratando de atemorizar a los agentes, para preservar la tercerización laboral (que garantiza mano de obra más barata). Un ejemplo de esto son los despidos en la cuenta de Banco Río, en Actionline.



Apoyamos el reclamo de reencuadramiento de los compañeros de las cuentas bancarias, y denunciamos la pasividad de las direcciones sindicales, cuyo único interés es dotarse de una base mayor de afiliados para engordar sus arcas financieras.



Quebremos la tercerización laboral.



Publicado en La Voz de los Call Centers, número 4, septiembre 2010.

Teleperformance: víctimas del vaciamiento

Desde hace ya varios meses, Teleperformance viene llevando adelante un desguace de las cuentas de Vodafone. Cientos de agentes han sido despedidos, mientras que una ínfima minoría fue relocalizada en otras cuentas, con peores condiciones de trabajo.



La empresa se niega a explicar por qué, a pesar de las enormes ganancias de las que se jacta en la prensa financiera mundial, está procediendo a estos despidos masivos.



El vaciamiento de Vodafone-TP no sería posible sin la alevosa complicidad del Sindicato, y del Cuerpo de Delegados de Yrigoyen, quienes no han convocado a asamblea ni a medida de lucha alguna, y reproducen ante los agentes los argumentos de la empresa y sus gerentes.



Desde Telemarketers en Lucha venimos siguiendo el proceso paso a paso, a partir de declaraciones que han circulado dentro y fuera de los edificios. Frente a la complicidad de la burocracia sindical con la patronal (hasta el momento sólo denunciada por nuestra agrupación), estamos organizando una comisión de despedidos y trabajadores, que ponga en marcha una campaña pública denunciando el vaciamiento patronal, y las condiciones de trabajo dentro de la compañía.


Publicado en La Voz de los Call Centers, número 4, septiembre 2010.

"En Teletech hay despidos todo el tiempo"

Dialogamos con Fernando, agente despedido del edificio de Chacabuco.


Contanos de los despidos en Teletech…



En Teletech se dan desipidos todo el tiempo, muchos supuestamente con causa. Cuando ves lo que ponen en el telegrama de despido, resulta que mayormente son excusas para echarte sin siquiera pagarte la indemnización.



¿Cuáles son las condiciones de trabajo?



Se trabaja con cola de llamadas. Esto es, para los que no saben, que vos estás atendiendo a un cliente, se termina esa llamada e inmediatamente cae otra llamada, sin tener momento de descanso entre llamada y llamada.



También te plantean metas casi inalcanzables para lograr llegar a la variable o bono, que es una plata más al sueldo (…) realmente poca gente o nadie lo logra, y siempre te están cambiando las consignas de cómo atender. Por consiguiente, cuando lográs desempeñarte bien, te cambian el modo en el que tenés que hacerlo para poder comisionar, y así sucesivamente (…).



También se ven irregularidades en el momento de liquidar el sueldo (…) en fin, ellos prometen un montón de cosas cuando te ofrecen el trabajo, y después te encontrás con una realidad muy distinta: se trabaja bajo enorme presión (…) y ritmos extremadamente estresantes.



¿El sindicato de comercio está enterado de esta situación?



Con respecto al sindicato, hay algunos chicos que fueron a consultar al sindicato de comercio y las respuestas que les dieron llaman mucho la atención, por ejemplo a una chica le dijeron “a vos lo mejor que te puede pasar en este momento es que te echen así te pagan la indemnización”. Yo no podía creer que le dijeran semejante barbaridad, cuando se supone que el rol de un sindicato es en primer lugar preservar la fuente de trabajo, todos sabemos que por más indemnización que te paguen, si no conseguís laburo rápido esa plata te la comés en unos meses, pero aparte de esto, lo que te pagan no supera los 2000 o 3000 pesos de liquidación, como es el caso de todos los despidos que conozco.



Aparte no tenemos delegados de sección, se supone que cada 50 obreros debe haber uno, acá en Teletech no existe eso, los trabajadores están desamparados totalmente por parte del sindicato, y cuando les pedís ayuda pareciera que les preocupa más la empresa que tu problema (…)



¿Hay algo más que quieras agregar?



Cuando entré a Teletech, algunos compañeros me comentaban que en esa empresa estaba prohibido hacer huelgas o paros (…) me pone contento que en otros call centers se estén organizando y estén luchando por mejores condiciones laborales, invito a los trabajadores y trabajadoras de Teletech a sumarse a esta movida esperanzadora.

Saludos a mis ex-compañeros de Orange Postpago y Prepago de la noche en Teletech.


Publicado en La Voz de los Call Centers, número 4, septiembre 2010.

Matrimonio igualitario: el significado de una victoria

Extractos de Prensa Obrera 1137, 15/7/10

La aprobación del matrimonio igualitario es una incuestionable victoria de los derechos democráticos, contra el clero y contra la reacción política.



“Estamos bajo una fuerte presión externa”, dijo Rodríguez Saa, anticipando la derrota del rechazo al matrimonio gay, minutos antes de la votación. En una sociedad caracterizada por la represión a la juventud, la discriminación laboral, el trabajo en negro y la opresión extrema a la mujer trabajadora, el reclamo del matrimonio igualitario se ganó una inocultable simpatía popular. El Senado deliberó bajo esa presión.



La derrota de la Iglesia debe medirse con referencia a la brutal escalada que lanzó contra esta ley. (…)



Miseria política



La ajustada votación revela hasta qué punto la hostilidad a los derechos democráticos domina la agenda de los partidos capitalistas. Esa oposición fue disimulada con la “libertad de conciencia” que todos ellos otorgaron a sus legisladores. El gobierno K, que se atribuye el impulso del proyecto, no pudo disciplinar a una parte importante de sus senadores del interior (…) Cristina Kirchner permaneció en silencio durante todo el tratamiento parlamentario. (…)



(…) Los partidos históricos de la burguesía son tan dependientes de las capillas confesionales como de los grupos capitalistas que los financian.



Síntoma político



Con su ofensiva contra el matrimonio homosexual, la Iglesia quería introducir una agenda de mayor alcance, que sirviera de base para un reagrupamiento político derechista. Ese programa planteaba el fin de los juicios militares en nombre de la “reconciliación”, el archivo definitivo para el derecho al aborto, tal como lo plantearon varios obispos en sus homilías.



La derrota del Senado es un golpe a esa agenda reaccionaria. Ni qué decir que el kirchnerismo, que enfrentó tardíamente esa ofensiva clerical, pretenderá adjudicarse la conquista. Pero (…) se trata del gobierno que juró vetar la causa popular más importante del momento, o sea, la elevación de las jubilaciones al 82% del mínimo y su actualización con los salarios. En la misma noche de la votación del Senado, el oficialismo pugnaba por acomodar la ley de glaciares a los intereses de la Barrick Gold.




La victoria del matrimonio homosexual es un acicate para la conquista de todos los reclamos democráticos y sociales pendientes, desde el derecho al aborto hasta la conquista del 82% móvil. Pero no podemos delegar las batallas que se vienen en los partidos o direcciones gremiales atadas al capital y a la reacción política. Tomemos en nuestras manos la lucha por el salario, las jubilaciones y los derechos democráticos, para desarrollar sobre esa base una alternativa política propia.

Publicado en La Voz de los Call Centers, número 4, septiembre 2010.